calas benidorm

La temperatura en Benidorm en agosto alcanza unas máximas de 31º y mínimas de 21º, las más altas de todo el año. El sol brilla como en ningún otro momento durante todo el día. Desde cualquier lugar de la ciudad podrás ver el azul brillante del Mar Mediterráneo y oler la fragancia que expande por ella. Si estás alojado en un apartamento en Benidorm, con estas circunstancias el plan más apetecible durante las vacaciones en Benidorm es, por si quedaba alguna duda, pasar el día relajándose en cualquiera de las playas que ofrece la ciudad.

En este blog escribimos una mini guía de las playas de Benidorm para que puedas conocer las que se encuentran en el centro, las que tienen chiringuito, las que se pueden ir con perros… Sin embargo, hoy queremos centrarnos en dos de ellas que son perfectas para dejarse atrapar por la naturaleza. Dos bellezas en las que olvidarse del bullicio de la ciudad y de la rutina para entregarse por completo a la relajación y la calma. Nos estamos refiriendo a las dos calas de Benidorm: la Cala del Tío Ximo y la Cala Almadrava.

 

Las mejores calas de Benidorm

Estos dos trocitos de paraíso se encuentran a los pies de la Serra Gelada. Son las dos únicas playas nudistas de Benidorm, son perfectas para practicar snorkel, las rocas y piedras hacen imprescindible el uso de calzado apropiado (como escarpines), cuentan con puestos de vigilancia y socorrismo y son realmente preciosas.

Si dispones de medio de transporte, el acceso a ellas es relativamente sencillo. Están muy próximas entre sí, y aparcando entre las dos podrás visitar ambas. Desde el extremo de la Playa de Levante en el Rincón de Loix, subiendo por la empinada calle Alcalde Manuel Catalán Chana, ya podrás ver las indicaciones hacia la Cala del Tío Ximo. La línea de bus 024, que se coge en la Avenida Ametlla de Mar o al final de la Avenida Madrid (paseo de Levante), también te lleva a las calas de Benidorm.

A lo largo de la calle Dos Calas (la que te lleva hacia ellas) disfrutarás de unas increíbles vistas del Mediterráneo, de la Isla de Benidorm y del skyline. Y, aunque hayamos dicho que llegar a ellas es sencillo, te recomendamos llevar el bolso de playa bien cargado de agua y comida, ya que están suficientemente alejadas de comercios como para que te vaya a apetecer desplazarte.

Una vez arriba, tienes tres opciones: Tío Ximo, Almadrava, o la que nosotros recomendamos, visitar las dos.

Calas de Benidorm: Tío Ximo

La Cala del Tío Ximo es la más pequeña de las dos. Sus escasos metros están cubiertos casi en su totalidad de arena fina, piedra y roca, por lo que ir equipado con un buen calzado y una silla es habitual en quienes la visitan. Sin embargo, también encontrarás allí tumbonas y sombrillas de alquiler.

El agua de esta cala es clara y cristalina, por lo que verás a muchos nadadores practicando snorkel. Podrás hacer un recorrido circular observando y disfrutando del fondo marino de las paredes que envuelven la cala.

Si vas temprano, encontrarás aparcamiento a escasos metros del acceso a la playa. Pero si no, deberás dejar el coche en un aparcamiento improvisado en la parte alta de la cala y bajar a ella andando.

Calas de Benidorm: Almadrava

La Cala Almadrava es un poco más grande que la primera, tiene más trozos de arena (aunque también piedras y rocas) y un agua transparente y tranquila en la que desearás darte un chapuzón nada más verla.

Para llegar a ella, debes dejar el coche en el mismo aparcamiento improvisado que hemos comentado para la Cala del Tío Ximo y bajar andando por un sendero a través de la montaña. Debes fijarte bien porque la indicación podría pasar inadvertida. El camino empieza a través de unas escaleras y prosigue campo a través. Es sencillo de recorrer en, aproximadamente, 5 minutos.

De nuevo, es una playa, por su claridad y riqueza marítima, muy indicada para la práctica de snorkel y buceo y es posible que a lo largo del día sea visitada por personas que estén haciendo una ruta en kayak.